En un mes de julio, no importa el año... La Esperanza se manifestó en la vida sin gracia y sin motivo de un alma errante...
Sin pensarlo dos veces, esta alma se aferro a la esperanza cuan naufrago se aferra a un trozo de madera en medio del mar, para así su mortal vida tratar de salvar, tratando así encontrar un poco de paz y su dolor poder mitigar...
Fueron pasando los meses y esta alma cada vez se fue poniendo más fuerte, se diría que incluso más resistente... Pero los vientos de tempestad son fuertes y en algunos momentos se sentía desfallecer, pero la esperanza le mostraba un rayo de sol y así a la oscuridad de ella apartaba...
El alma ya se sentía más libre de todo dolor, de toda carga que en ella habitaba, pero a pesar de ya no sentirse agobiada, a la esperanza de lado nunca dejo...
El día de hoy a esta esperanza decido ponerle un nombre, el tuyo...
A esa alma errante, llena de dolor y agobio, le he puesto el mío...
Fuiste y serás mi esperanza, no me dejes naufragar, que sin ti todo pierde sentido....