El ser humano comete mil errores en su vida, algunos nos damos cuenta pero pensamos que es tarde para decir LO SIENTO, ME EQUIVOQUE... Cuando en realidad nunca es tarde para decirlo... El hombre no es un ser perfecto pues la mayoría de las veces no sabe callar cuando debería, habla cuando debería callar... Se mantiene aislado cuando debería buscar compañía, se mantiene en compañía cuando tendría que estar solo y meditando sobre sus metas y sobre sus reaccionar, ante los acontecimientos de su vida... Prefiere huir de los problemas, antes de resolverlos, se conforma con lo poco que consigue diciendo, TENGO LO QUE ME MERESCO, cuando en realidad no obtiene ni la mitad de lo que en realidad se merece...
Preferimos a veces escapar de nuestra triste realidad, disfrazarla con sonrisas que solo agobian el alma, preferimos vivir en una burbuja que tarde o temprano explotara. Somos cobardes y a la vez valientes, cobardes porque no luchamos por lo que queremos, valientes para juzgar, humillar incluso acusar a los demás de algo que no han hecho… Y si nos damos cuenta, no somos capaces de decir que lo sentimos…
No somos capaces de afrontar nuestras equivocaciones preferimos buscar culpables a nuestras propias equivocaciones, cuando somos nosotros mismos nuestros verdugos y peores jueces…
Tal vez no todos seamos así, tal vez solo me describí en realidad…